La remolacha es un alimento rico en folatos, oxalatos, betanina, tiamina, carbohidratos, vitamina C y minerales como el hierro, el potasio y el magnesio. También es rica en fibra y antioxidantes.
Contiene betacarotenos, carotenoides y flavonoides. Son ellos los que le ofrecen ese color carmesí tan atractivo, y ellos quienes actúan como eficaces limpiadores hepáticos, en especial si sufrimos de hígado graso.
De seguro has escuchado que los antioxidantes son necesarios para el organismo, pero: ¿qué es lo que hacen en realidad estos elementos?
En resumen, frenan la acción de los radicales libres, con lo cual, los antioxidantes ayudan a proteger las células del desgaste. A su vez, ayudan a optimizar el funcionamiento del organismo.
Solo con cortar dos limones y mezclarlos con remolacha podrás limpiar tu hígado y hasta adelgaza, sí así es… Lee y descubre esta milagrosa mezcla para tu salud. Como ya debes saber, el hígado es un órgano súper importante que actúa en la purificación del organismo, además cumple otras funciones que lo hacen de vital importancia para mantener niveles óptimos del cuerpo humano.
En la actualidad, miles de personas padecen del hígado graso y esto se debe a la acumulación permanente de grasa en ese órgano, gracias a los malos hábitos de alimentación y el estrés del día a día. Muchos pasan esta patología desapercibida pues parece inofensiva, sin embargo es la razón por la cual el hígado se hincha y ocasiona una constante sensación de llenura en quien lo padece.
Otras afecciones que esta enfermedad trae consigo es un dolor en el abdomen, específicamente en la parte media o superior, además puede provocar un cansancio extremo. Pero estos padecimientos molestos son cosa del pasado, pues te traemos un preparado natural con el que podrás combatirlos.
Se necesita:
- Dos remolachas, pueden ser medianas.
- Dos limones
- Dos tazas de agua.
Se recomienda que estos estén los más frescos posibles.
Manos a la obra
Debes limpiar y pelar las remolachas crudas, después de eso las cortamos en pequeños pedazos y lo mezclamos con la ayuda de la licuadora con el agua.
La mitad de esta mezcla debe ser colada, seguidamente todo se une con el zumo de limón y se debe evitar el vertido de azúcar al licuado, que debe consumirse tres veces al día por siete días, sin falta
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